
Voy, el álbum debut de la cantante y compositora venezolana Nella, representa el sonido de una música latina global para el siglo XXI. Creado e interpretado por Nella y el compositor, productor, y guitarrista español Javier Limón, ganador de un GRAMMY y múltiples Latin GRAMMY. Voy presenta la expresiva voz de la cantante sobre un acompañamiento frugal, casi minimalista. Esto es pop con algo para decir, en música y letra.
“Siento estas canciones como si las hubiera escrito yo”, dice Nella sobre su sociedad con Limón. “Ellas a menudo reflejan lo que estaba pasando en mi vida en ese momento. La música es una mezcla de muchas fuentes y las letras cuentan historias. Quiero llegarle a la gente, quiero darle más que simplemente algo para bailar”.
Lanzado por Casalimón America Records el pasado 31 de mayo, Voy ofrece 13 canciones, todas excepto por una, con letra y música de Limón. “Hacía años, desde mis días con Buika y el Cigala, que yo escribía tanta música. Es un repertorio completo para ella”, dice Limón. La canción “1000 Miles”, con música de Limón, tiene letra en inglés del escritor y cineasta español David Trueba.
La grabación incluye invitados especiales tales como la cantante de flamenco española Alba Molina (hija del famoso dúo Lola y Manuel); el intérprete de instrumentos de cuerdas Santiago Prieto, miembro de la banda colombiana Monsieur Periné, ganadora del Latin GRAMMY; y dos excepcionales músicos venezolanos, el fenomenal cuatrista Jorge Glem, y el cantante y compositor Ilan Chester, quien el año pasado recibió el Premio a la Excelencia Musical de la Academia Latina de la Grabación.
Nacida en la Isla Margarita, en el Mar del Caribe en la costa noreste de Venezuela, Nella (Marianella Rojas) recuerda pasar horas de niña cantando sobre los discos de poderosas cantantes como Christina Aguilera, Celine Dion, y Mariah Carey. “Tomaba lecciones de canto y me daba un poco de vergüenza cantar en casa, así que, para ocultarlo, tocaba los discos muy fuertes”. El ardid funcionó hasta que su maestra de canto le pidió al papá de Nella que escuchara a “la estudiante en la otra sala” y él quedó asombrado cuando se dio cuenta que era su hija.
“Tenía 11 años y es ahí donde ellos empiezan a creer en mí y a ayudarme en todo lo que venía después”, dice Nella. “Yo estaba involucrada en todo tipo de arte: canto, actuación, baile, lo que digas. A los 13, mi voz comenzó a cambiar y sin darme cuenta, por haber estado cantando con esos discos, imitando a esas divas, yo en realidad estaba estudiando y estudiando mucho. Ellas fueron unas maestras increíbles. Me encantaba. Y para mí lo más importante era qué tan rápido podía yo hacer un giro, o un melisma o qué tan alto podía llegar y eso obviamente me hizo desarrollar una flexibilidad que tal vez escuchando música venezolana no me lo hubiese dado. Creo que ha sido lo que ha llamado la atención en Venezuela: que al cantar un tema venezolano no sueno como la típica cantaora venezolana”.
En 2007, ella tenía 17 años, se mudó a Caracas, y en el 2011 se inscribió en el Berklee College of Music en Boston, con especialidad en actuación, composición y producción. En Boston, Nella comenzó a cantar en un trio que ofrecía un repertorio de música latinoamericana con influencias de jazz y pop. “Fue parte del proceso de redescubrirme a mí misma”, dice Nella. “Nos pasa a todos: una vez que te vas de tu país, las raíces tocan la puerta”. Fue también en esta época que ella descubrió a Buika, una cantante Española de raíces africanas cuyo estilo está marcado por la copla y el flamenco.
“Después de todas las acrobacias vocales que había aprendido, encontré la importancia de la interpretación, de cómo decir una letra”, explica Nella. “Y fue allí donde me enamoré del flamenco, esa honestidad esa verdad que hay entre el cantaor y la audiencia. Y allí empezó toda esa fascinación por ese mundo. Eso no lo había encontrado en otro género..”
Fue en Boston, en 2012, que una versión a cappella de Nella del merengue venezolano “La Negra Atilia”, que despertó el interés de Limón. “La había escuchado antes y pensaba que era muy, muy buena y muy versátil, pero esa noche escuché algo original en su manera de frasear”, recuerda Limón. “Me acuerdo que pensé ‘Ella tiene algo especial. Hay algo allí que es de ella’”.
Limón, quien ha trabajado con cantantes de primera línea tal como Estrella Morente y Mariza, dice que “Nella tiene una manera andaluza de frasear que es muy bella y muy natural. De hecho, mucha gente ha pensado que ella es andaluza. Cuando cantó en Todos Saben, la película de Asghar Farhadi con Penélope Cruz y Javier Bardem, mucha gente pensó que ella era de Córdoba o Granada”.
Sus admiradores ahora incluyen superestrellas del pop latino como Alejandro Sanz y luminarias del flamenco tal como Miguel Poveda.
En Voy, Nella canta canciones de amor como “Fin de Fiesta”, una de sus primeras elecciones y una canción que Limón “sacó de un libro de notas polvoriento y me cantó acompañándose en la guitarra. Y apenas lo escuché le dije ‘¡Esta! ¡Esta! Esta es la canción que debemos hacer juntos”.
Para su primera gira por Norte América, Nella será acompañada, en fiel reflejo del disco, por un trio de guitarra, bajo y percusión. El repertorio incluirá no sólo canciones de Voy, sino también “joyitas de la música venezolana” como “La Negra Atilia,” (“Una canción que ha sido un talismán para mí” ofrece) y clásicos por el legendario cantante y compositor Simón Díaz, como “Tonada de Luna Llena”.
“Sí, tengo un montón de canciones en la gaveta”, dice Nella.” “Pero en este momento estoy muy cómoda con lo que Javier escribe, y tener a alguien con él escribiendo para ti es un lujo. Y lo más importante es que las siento como mías.”